El encuentro fue organizado por este periódico junto al Consorci Mare -la denominación del consorcio para la ejecución de las previsiones del plan zonal de residuos 6, área de gestión A1, que gestiona los residuos urbanos de los 52 municipios que abarcan las comarcas de la Marina Alta y de la Marina Baja, junto con el municipio de El Campello- y contó con la participación de cinco expertos de distintos ámbitos político y empresarial:
José Vicente Ferriz, presidente del Consorci Mare y alcalde de Orxeta; Ángel Garcillán, director de la Delegación de Levante II en FCC Medio Ambiente; Amelia Navarro, presidenta de la Comisión de Responsabilidad Social Empresarial de la CEV y directora de Desarrollo Sostenible y Equidad de Hidraqua; Manuel Palomar, director del CENID y Joan Piquer, director general de Calidad y Educación Ambiental de la Generalitat Valenciana. Toni Cabot, director del Club INFORMACIÓN fue el encargado de moderar el foro.
Los desafíos de la Agenda 2030
En su intervención, Ángel Garcillán, señalaba que el compromiso 2030 supone un reto para los desafíos ambientales a nivel global, y destacaba que estos retos sostenibles pasan, en primer lugar, por un reto demográfico, «ya que en 2050 habrá una población de 9.700 millones de personas en el mundo y el 68% vivirá en zonas urbanas, lo que magnificará los desafíos en materia de contaminación ambiental, transporte y gestión de residuos».
Precisamente, hablando en términos de gestión de residuos, Garcillán ofrecía datos específicos, como que en el año 2018 en España se trataron casi 24 millones de toneladas de residuos municipales y que más del 50% todavía se destinan a vertederos. «El paquete de medidas de Economía Circular de la UE ha creado una hoja de ruta para invertir la pirámide en la jerarquía de los residuos, con el objetivo de llegar (con límite en 2035) a reciclar el 65% de los residuos urbanos y que lleguen menos de un 10% a vertederos. Y de momento, la tasa de reciclado en nuestro país todavía está muy por debajo de la media europea».
José Vicente Ferriz comentaba que los retos desde el Consorci Mare son múltiples y de enorme calado: desde la educación ambiental «la ciudadanía es el primer pilar al que tenemos que llegar para alcanzar estos objetivos sostenibles», hasta la modernización de las plantas de tratamiento de residuos «para que la recuperación del producto que llega a la planta sea lo más eficaz y eficiente posible», pasando por reforzar el modelo de Ecoparque y Ecomóvil «apostando por una flota fija y móvil que nos permita poder llegar hasta las zona rurales para que el ciudadano tenga un sitio cercano donde depositar los residuos que no puede tirar al contenedor».
No obstante, el reto principal para Ferriz se reduciría, simplemente en hacer llegar al vertedero lo mínimo posible: «Queremos que los residuos puedan tener una segunda vida, que se aprovechen al máximo y se conviertan en productos útiles, como materias primas secundarias».
Amelia Navarro, subrayaba en una de sus intervenciones que desde el año 2015 que se aprobó la Agenda 2030, «tanto los agentes sociales como las Administraciones estamos trabajando en su difusión», pero consideraba que no ha llegado de manera profunda a la ciudadanía.
«Según un informe de la Red Española del Pacto Mundial, el 74% de la población mundial ha oído hablar de la Agenda 2030, un valor muy alto y que en España alcanza el 80%, pero tan solo el 5% de la sociedad conoce en profundidad en qué consiste y cuáles son sus principales puntos».
«Actualmente tenemos grandes retos ambientales y sociales para impulsarla, pero todavía necesitamos mayor velocidad. La ONU ha denominado al periodo 2020-2030 la Década de acción, con cuatro grandes ejes: movilizar a todos los agentes políticos, sociales y empresariales para el cumplimiento de la Agenda 2030; promover soluciones innovadoras basadas en las alianzas público-privadas; establecer medidas concretas y medibles; y reconstruir de forma sostenible tras la crisis sanitaria del covid-19, que ha supuesto un freno para los ODS.
Medidas concretas
Ante la cuestión: ¿Qué se está haciendo ya para la consecución de estos retos? Joan Piquer respondía que desde la Generalitat Valenciana existen muchas líneas y programas de apoyo concretos relacionados con la economía sostenible y los ODS, destacando la inversión de 44 millones de euros que irán dirigidos el próximo mes de enero a las administraciones locales para mejorar la gestión de los residuos. «Una comunidad autónoma turística, agrícola e industrial como la nuestra no puede permitirse gestionar mal los recursos que contienen los residuos».
Según Piquer, en este sentido nos dirigimos hacia nuevos modelos y procesos: «nuevos sistemas de recogida separada en origen; nuevos procedimientos más sostenibles, como la incorporación de vehículos de recogida eléctricos para reducir la huella de carbono; nuevos procesos de tratamiento y plantas de tratamiento renovadas para flujos de materiales que se van a recoger separadamente en origen, ya que la materia orgánica supone un 40% del peso de nuestros residuos y es importante trabajar en ello».
Ángel Garcillán, por su parte, añadía a esta lista la digitalización de los servicios municipales: «se están implantando contenedores de residuos inteligentes con sensor de llenado, que nos permiten planificar las rutas y servicios de manera más eficiente, y también con identificación de usuario, con el futuro objetivo de que la administración bonifique al ciudadano que colabore más con el reciclaje».
Por otro lado, una acción muy importante ha sido la renovación que ha hecho FCC Medio Ambiente en la planta de tratamiento de El Campello, gracias al impulso de la GVA y el Consorci Mare. «Se han implantado las mejores técnicas disponibles en la actualidad, se han automatizado numerosos procesos, y se han incorporado tecnologías de última generación. Ha supuesto una inversión de más de 20 millones de euros, pero va a marcar un antes y un después a la hora de optimizar el funcionamiento de la instalación y obtener muchos más residuos valorizables que anteriormente», afirmaba Garcillán. «Se calcula que, gracias a estas mejoras, evitamos unas 80.000 tonteladas de CO2 a la atmósfera anualmente, lo que equivale a las emisiones anuales generadas por 6500 hogares», concluía.
Hablando de medidas concretas, José Vicente Ferriz indicaba que desde el Consorci Mare han puesto en marcha diferentes herramientas al servicio de la ciudadanía para alcanzar el objetivo común de mejorar en sostenibilidad y en materia de reciclaje. «La última, una App para acercar al ciudadano toda la información que necesita para mejorar la gestión y recuperación de residuos: dónde debe depositarse cada producto, darle a conocer la red de Ecoparques y Ecomóvil y hacerle llegar las últimas noticias del consorcio. Lo importante es que el ciudadano sepa de primera mano qué tiene que hacer con sus residuos, porque el mal uso ocurre más por desconocimiento que por falta de motivación».
Además, el presidente del Consorci Mare aprovechó el foro para anunciar que la planta de residuos de El Campello se va a hacer visitable «con el objetivo de que escolares, empresas y cualquier ciudadano pueda conocer el trabajo que se hace con sus residuos y saber cómo se recuperan».
«Una gestión eficiente de los residuos tiene un coste, pero más costoso para nuestro planea, y nuestra economía, es no hacer nada. Separando en casa colaboramos mucho más con el medio ambiente de lo que pensamos», concluía Ferriz.
Obseratorio Alicantino para el Desarrollo Sostenible
¿Cómo se pueden aplicar las mejores políticas de sostenibilidad y gestión de recursos? Contando con datos concretos y específicos. De eso se ocupa el Centro de Inteligencia Digital de Alicante (CENID), impulsado por la UA, la UMH y la Diputación de Alicante, «desde el centro nos dedicamos a la obtención de datos y tratamos de propiciar herramientas digitales a los 141 municipios de la provincia de Alicante para mejorar sus competencias», señalaba Manuel Palomar, director del CENID, en el foro celebrado el pasado jueves. «Consideramos que la Agenda 2030 es competencia directa de las instituciones públicas y a nivel municipal es una herramienta imprescindible para aplicar políticas claras en el desarrollo de los Objetivos de Desarrollo Sostenible».
Es por ello que el CENID ha creado el «Observatorio Alicantino para el Desarrollo Sostenible», una plataforma desde la que impulsar la consecución de las metas establecidas en la Agenda 2030. «A través de los 17 ODS y 57 indicadores más, recabamos datos de los municipios para obtener un análisis en materia de sostenibilidad y gestión de residuos, determinando la brecha existente entre la situación actual y el objetivo que pretenden alcanzar».
Si no hay datos, información, ni evidencias, es difícil aplicar políticas institucionales en línea con los ODS. «Esta plataforma permite a las administraciones la toma de decisiones basadas en datos», afirmaba Palomar, que señalaba que la tasa de reciclado de residuos urbanos es uno de los principales indicadores que se utilizan: «la UE marca para el 2025 una tasa de reciclado del 55% , la media europea roza el 47% y en España es del 35%. El observatorio ofrece la tasa de cada municipio de Alicante para saber dónde hay que aplicar más información o políticas para mejorar».
FUENTE: https://www.informacion.es/economia/2021/12/17/sostenibles-mejorar-gestion-residuos-60794784.html